Una maravilla de Hotel,se destaca por su limpieza y la atención al cliente. Quisiera mencionar a Henry y a Ramón en el restaurante, la presentación de los platos allí es excelente. Además nos encantó un bodegón que hay en el estacionamiento llamado chiringuito dónde trabajan Angel y Amanda,ambos anfitriones de altura,no solo por el buen trato sino también por su profesionalidad.Imposible estar en el hotel,sin pasar por ese establecimiento cada día.Mis felicitaciones a todo el colectivo y encargados.El club de playa a pesar de estar en reforma, brindó un servicio espectacular.Solo señalar que la piscina del hotel es de agua muy frías y en las noches el aire acondicionado de las habitaciones es deficiente o pobre. También se cuenta con una agencia de taxi VIP, muy recomendado en especial al chófer Luis.